Recientemente los gobiernos de los países ricos, asustados ante una crisis en los que ellos han jugado el papel delictivo de la “colaboración necesaria”, han insuflado millones de millones de euros para que los ricos puedan dormir tranquilos. De la noche a la mañana –no se sabe muy bien de donde- el gobierno español ha librado cien mil millones de euros para que la banca tape sus agujeros. Con la gracia que le caracteriza el ministro Solbes ha manifestado hace poco que “las ayudas a la banca todavía no las notan las familias”, que es como decir “que el frío de Siberia todavía no se nota en Fuerteventura”, o que “en la Casa Blanca todavía no se nota el humo de la central térmica de El Charco.” Si el dinero estaba destinado a las personas, ¿por qué no se nos da a las personas?
El caso es que hay dinero. Pero mal repartido. Desde mucho antes de la llegada de la crisis varios colectivos vienen reivindicando nuestro derecho a que todas las personas reciban periódicamente una cantidad de dinero que nos permitan vivir dignamente. Un derecho universal conocido como la Renta Básica de las Iguales. Un derecho que, lejos de ser utópico, es factible. Y si no que se lo pregunten a Solbes y sus (nuestros) cien mil millones.
El jueves y viernes próximos (días 15 y 16) a las 20:00 horas en CALIGRAMA, se realizarán unas jornadas sobre la RENTA BÁSICA bajo la coordinación del economista José Iglesias Fernández y del trabajador social Manuel Saez Bayona. En la asociación cultural CALIGRAMA hemos hecho un gran esfuerzo para que ambas personas puedan venir a Fuerteventura a compartir con nosotros/as sus conocimientos e inquietudes sobre este tema. ¿Te lo vas a perder?